Menos carne para todos: Los efectos de cerrar las exportaciones e intervenir los mercados
El cambio de gabinete ha llevado a que se pongan en discusión los números de la ganadería argentina según el registro de la ultima publicación del Ministerio de Agricultura de la Nación.
Un Ministerio que quiere mostrarse activo con el tema, aunque lento para poder publicar las resoluciones, la interna del gobierno sigue persistiendo a pesar del resultado electoral, pero se hacen pronósticos analizando algunos datos que parecen que podrían ser los que sucederán, todos estos números olvidan que la economía es expectativa y que el clima manda en la producción argentina.
Poniendo en claro lo que dicen los números oficiales hasta Agosto, vemos que la medida ha llevado a una disminución de las cabezas faenadas, algo más de 585000, lo que ha tenido como resultado UNA MENOR PRODUCCIÓN DE CARNE para todos y todas.
La caída en la cantidad de cabezas faenadas ha sido masivamente en las categorías de consumo interno, algo más de 378000 cabezas hasta Agosto, lo que implica que el consumidor argentino tuvo una oferta menor de carne, 97000 toneladas menos hasta Agosto, conclusión cuotificando la exportación NO SUCEDIÓ que haya más carne para todos.
El gráfico nos muestra que el efecto de la medida fue producir 134755 toneladas menos en el acumulado Enero Agosto, dejando de exportar 37500 toneladas hasta Agosto, con menor oferta de carne al mercado interno, 97255 toneladas menos.
Si nos basamos en las entradas del mercado de Liniers, principal afectado por la medida que ha perdido entre un 13 y un 15 % de ingresos de hacienda, con un record en el mes de Septiembre cercano a una caída del 30 %.
Extrapolando estos datos, estimamos que la caída de la faena para septiembre será de al menos un 10 %, aumentando la caída de la producción de carne argentina.
Cada crisis económica ha llevado a una retracción en los ingresos al Mercado de Hacienda de Liniers en más de una oportunidad.
La pandemia también provocó menores ingresos, pero se debió a la necesidad de aplicar protocolos.
La novedad es la reacción de los productores que conociendo la historia de intervenciones en el mercado decidieron reducir las remisiones al mercado, marcando un récord histórico en la caída de los envíos a Liniers en el mes de Septiembre.
El Gobierno Argentino dice que logró contener la suba de precios, pero la realidad es que la suba de precios la produjo la falta de poder adquisitivo de la gente, en un escenario normal con tal faltante de oferta de carne los precios hubieran tendido a la suba, lo que pasó es que como se mató la expectativa del negocio ganadero, esto llevó a una tranquilidad en los ofrecimientos por parte de los compradores.
El cuadro muestra que hasta el cierre y cuotificación del mercado, el índice de novillo Liniers había superado el valor del dólar paralelo, la intervención del mercado ha provocado una retracción de los precios tanto en pesos como en dólares.
Los números oficiales nos muestran que la intervención del mercado ha provocado la caída en la producción de carne, esta caída tiene como consecuencia una caída directa del empleo en la cadena, menos mano de obra y menos fletes.
La intervención ha provocado la muerte de las expectativas futuras respecto del negocio de la carne vacuna argentina, que necesita inversiones permanentes para poder seguir mejorando su productividad.
Menos carne para todos, menos empleo parece que es el planteo que aún no se corrige.
Ing. Andres Costamagna - GyC