En 2022, los valores de la hacienda quedaron muy rezagados respecto de la inflación
Así surge del último informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (Ciccra). La entidad calculó que el precio promedio del animal en pie negociado en el Mercado Agroganadero de Cañuelas (MAG) quedó 32% por debajo del nivel general medido, en los últimos 12 meses, por el Índice de Precios Internos Mayoristas (IPIM) del INDEC, mientras que el precio al consumidor no se modifica desde hace 7 meses.
En este contexto, los corrales de encierre tampoco escaparon a este escenario de pérdidas: por cada cabeza engordada, los feedloteros resignaron hasta $40.000, entre costos de producción e impuestos.
En diciembre de 2022, los valores promedio de la hacienda se recuperaron de manera parcial, pero no alcanzaron para recomponer la caída registrada entre agosto y octubre. En diciembre, el precio promedio subió 4,1% con respecto a noviembre y quedó en $265,8 por kilo vivo, pero se mantuvo 2,4% por debajo del nivel máximo de agosto.
Categorías. Durante el último mes del año, en el MAG, se vendieron 91.021 cabezas, un 10,2% menos respecto de noviembre. En su informe, Ciccra manifestó que “la recuperación de los precios observada en diciembre alcanzó a todas las categorías. La excepción estuvo en los MEJ (Machos Enteros Jóvenes), cuyo valor promedio descendió un 1,5% con respecto a noviembre”.
Entre noviembre y diciembre de 2022, las vacas especiales de más de 430 kg, los novillos y las vacas conserva buena fueron las categorías que más mejoraron sus precios, con subas superiores a 4,5%.
En tanto, las vaquillonas, las vacas especiales de hasta 430 kilos, los novillitos, las vacas regulares, los toros y las vacas conserva inferiores mejoraron sus precios a un menor ritmo, entre 0,7% y 2,8% mensual.
Ancla. Por otra parte, un informe elaborado por los Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (CREA), indica que la evolución en los precios de venta al público de la carne vacuna fue relevante en las últimas mediciones de inflación, que registraron una leve baja.
Para la entidad, desde abril, estos valores fueron por detrás de la inflación, en un escenario de altos niveles de faena y debilidad de la demanda. “El rubro carnes aumentó solo 0,9% mensual en noviembre y, en el año, acumula una suba de 57,6%, casi 30 puntos por debajo de la inflación general, de 85,3%”, precisó.
Al respecto, consideró que, si bien la dinámica inflacionaria depende, en el largo plazo, de la configuración de la política macroeconómica en general, y monetaria en particular, el comportamiento del mercado ganadero favoreció una cierta moderación de la inflación.
“Para lograr una baja consistente de la inflación, más allá de que la carne pueda oficiar como ‘ancla’ en el corto plazo, el Gobierno deberá mantener la disciplina fiscal y monetaria de cara a un año electoral. En ese sentido, los precios de la carne típicamente se mueven de forma cíclica y es esperable que repunten en el futuro”, advirtió CREA.
