Fibra propia de alta calidad para asegurarla rentabilidad
Los engordes a corral profesionales y los caseros, deben mejorar las eficiencias productivas integrales, bajando los índices de conversión.
Los esfuerzos para lograr esta tarea son neutralizados con la devaluación del peso, condicionando el resultado económico ante un maíz de alto costo.
Para lo que queda del 2018 las restricciones internas de oferta de maíz no tendrá soluciones, pero a partir de Marzo 2019 la nueva cosecha podrá mejorar en parte la capacidad de negociación para conseguir mejoras en los precios.
Lentamente los valores de la hacienda terminada con destino a faena se vienen actualizando, restringidos por una oferta suficiente y una capacidad de pago del consumidor restringida.
Tarifas, aumentos de combustibles y paritarias que no igualan a la inflación.
La suba de los precios de hacienda gorda se sostendrá hasta fin de año, no será suficiente para cubrir los quebrantos, dólar aumentando por encima de la inflación encarecen los costos de transporte entre otros costos internos.
Con una primavera auspiciosa para la pampa húmeda, con restricciones dependiente de lluvias tempranas y heladas tardías en el resto del país, esperamos que la producción sea normal o superior a la actual. La intención de siembra de maíz supera el 30 % de superficie del 2017-2018.
La coyuntura es dolorosa, el futuro parece prometernos mejores momentos y resultados después de Marzo, quienes planifiquen adecuadamente podrán capturar la nueva realidad que será con precios acordes a los esfuerzos realizados.
Los engordes a corral que puedan producir fibra propia tendrán grandes ventajas para poder enfrentar el nuevo año, para ello deben evaluar correctamente como producir y que producir.
Silajes de alta calidad son imprescindibles, la elección del cultivo y del material a picar resulta de importancia superlativa para el panorama futuro.
Haciendo números, un silaje de alta calidad de sorgo, alta producción de materia seca por hectárea permite tener un silaje que cuesta por kilo de materia seca la mitad en comparación con picar un cultivo de maíz con una productividad superior.
Tener disponibilidad de fibra propia dará a quien lo logre, la posibilidad de tener mayor flexibilidad en el negocio, poder plantear recrías a bajo costo, la consecuencia del alto costo de grano es poco interés por el ternero liviano, generando una oportunidad que no todos podrán aprovechar.
Planificar, medir, controlar son herramientas de bajo costo, se necesita poder tener un asesoramiento adecuado y decisiones firmes.
El futuro es prometedor, pero hay que hacer las cosas de una manera diferente.
Ing. Andres Costamagna. GYC