Lechería brasileña estancada en 2018, Argentina y Uruguay mas competitiva

De acuerdo a Glauco Carvalho, uno de los miembros del equipo, cuando se publican los contenidos de la época, la actividad debe terminar el año estancada o crecer muy poco en relación a 2017.

De acuerdo con el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística ( IBGE ), en ese año, la producción de leche inspeccionada creció un 5%, tras un bienio con menor producción: 2015 (caída del 2,8%) y 2016 (caída del 3,7%). 

Esto significa que el sector debe cerrar 2018 con un volumen anual menor que el año 2014, antes de la profundización de la crisis económica, cuando la producción inspeccionada fue de 24.700 millones de litros de leche y el volumen total llegó a 35.100 millones de litros.

"Aunque el productor de leche está acostumbrado a desafíos y sobresaltos, 2018 fue atípico, desafiando al productor en diversos aspectos", observa Carvalho. El primer desafío, según el experto, fue el precio del litro de leche pagado al productor, que comenzó el año en cerca de R $ 1,20 (poco por encima de lo que se pagó en 2016, en el auge de la crisis).

Además de los precios bajos a principios de año, el costo de producción se ha elevado, cerrando el primer semestre con un alza de casi el 6% con respecto al mismo período del año anterior. 

Los ítems que más impactaron en la rentabilidad del ganadero fueron los ligados a la alimentación del rebaño (concentrado, producción de voluminosos y sal mineral). Los precios del maíz y de la soja subieron en plena cosecha debido a la caída de la producción de granos en Argentina ya la reducción de la cosecha brasileña de maíz, entre otros factores.

Alta del 18,5% de los costes en 12 meses

Los precios internacionales de los granos también impactaron,  la fuerte apreciación del dólar frente al real y los reflejos de la guerra comercial entre Estados Unidos y China. Sumados al aumento de los precios de la energía y del combustible en Brasil, esto llevó a un alza del 18,5% en los costos de producción en el período de octubre de 2017 a octubre de 2018. De esa forma, el precio real al productor en 2018, deflacionado por el costo de producción, registró una caída del 1,5% con respecto a 2017.

Otro desafío fue la huelga de los camioneros, que además de afectar la producción primaria, comprometiendo la alimentación de los animales, paralizó las actividades de la industria y consumió los stocks de los productos lácteos y de los minoristas. En mayo, cuando ocurrió la huelga, se registró el peor índice que se tiene noticia para un solo mes, con la producción cayendo un 9,3% más baja en relación a mayo del año anterior. Este número revela que ya no se han captado 176,7 millones de litros de leche. Sin poder arrojar la producción durante los diez días de paralización, la cuenta de la huelga fue pagada por los ganaderos y los productos lácteos.

Leche argentina y uruguaya más competitiva

El tercer desafío vino  de afuera. Argentina y Uruguay, los principales exportadores de leche en el Mercosur ,presentan precios más competitivos que Brasil, con el producto que viene a costar R $ 1.00 por litro. 

En Brasil en el pico del precio, el productor llegó a recibir por el litro de leche  R $ 1,50. Con valores de los países vecinos tan bajos, la importación fue estimulada, principalmente en el último trimestre. 

"El país sigue siendo un importador neto y debemos cerrar 2018 con un déficit de medio billón de dólares, lo que equivale a mil millones de litros de leche", subraya Carvalho.

El escenario mundial, además del Mercosur, tampoco es favorable a los precios. De acuerdo con el índice del Comercio Global Dairy ( GDT ), la leche en polvo se vende en la primera semana de diciembre, a $ 2,667.00 la tonelada. En los últimos tres años, la mejor cotización se produjo en diciembre de 2016: cerca de 3.600,00.

El cuarto desafío es un viejo conocido de la cadena productiva de la leche: el débil desempeño del consumo de productos lácteos, asociado a bajos ingresos de la población. 

A pesar de la tímida recuperación de la economía, la tasa de desempleo sigue siendo alta (11,6%). El investigador de Embrapa Gado de Leche, João César Resende, dice que el consumo de lácteos es bastante sensible a las variaciones del poder adquisitivo del consumidor. 

Según él, cuando hay una retracción de la economía, productos como el yogurt y el queso son algunos de los primeros en ser eliminados de la lista de compras.

Incluso con el litro de la leche UHT siendo vendido a R $ 1,85 en algunos supermercados, en el cuarto trimestre, la demanda no demostró aliento para calentarse. Las previsiones para el PBI también decepcionaron. En enero, la expectativa de los economistas era que el PBI cerrarse 2018 con un crecimiento del 2,66%. Al final del año, la expectativa cayó al 1,30%

Los investigadores creen que 2019 será mejor para la cadena productiva de la leche. La primera barrera a ser superada se refiere a los precios de los competidores en el Mercosur. 

El analista de Embrapa, Denis Teixeira da Rocha, afirma que los precios  de los socios del Cono Sur no son sostenibles y deben, en algún momento, volver a la realidad. "Debido a la rentabilidad negativa, en los últimos años, tres grandes lácteos cerraron sus puertas en Uruguay", destaca Rocha.

El mundo necesitará más leche

Con respecto al mercado mundial, durante la conferencia anual de la Red Internacional de Granja Comparación ( IFCN ), en 2018, se celebró en Parma, Italia, los expertos estiman un crecimiento ligeramente más robusto de la demanda de productos lácteos para el 2019.

De acuerdo con el investigador de Embrapa La estimación del IFCN es que para atender a la demanda de productos lácteos en 2030, el sector deberá aumentar la producción en 304 millones de toneladas al año. Esto equivale a tres veces la producción lechera de Estados Unidos, actualmente. 

Para activar esta producción, el IFCN cree que el precio de la leche mundial alcanza los 0,40, un valor superior al promedio histórico.

Internamente, la expectativa de cambios en la economía con el nuevo gobierno ha animado el mercado. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico ( OCDE ) prevé un crecimiento de la economía brasileña en un 2,1%. El mercado espera un índice un poco mayor: el 2,5%. De cualquier forma, según Carvalho, será el ritmo de marcha de las reformas que dictará el compás del mercado para este año.

Para el investigador, hay una demanda reprimida por productos lácteos que se arrastra por años y algún crecimiento económico impulsará la venta de esos productos. Carvalho cree aún en mejora en los márgenes de ganancia de los productos lácteos, que se encuentran bajas desde mediados de 2016.

Más granos, menos costos de alimentación

En lo que se refiere a los beneficios del productor, 2019 comenzó con los precios en niveles un poco más altos que los de principios del año anterior. 

La buena producción de granos de la cosecha 2018/2019, que la expectativa de la Compañía Nacional de Abastecimiento ( Conab ) debe ser superior a 230 millones de toneladas, es positivo para el ganado lechero. 

El récord en las cosechas de soja y maíz contribuye al retroceso en los costos con la alimentación de las vacas, sobre todo la producción de concentrados. 

"La reducción del precio de importantes insumos debe mejorar la rentabilidad de las granjas, culminando en la expansión de la producción lechera en 2019", concluye Carvalho.

Fuente: Prensa Embrapa Ganado de Leche