Para empezar, debemos entender el indicador DHA, que es formado por el Parto Por Hembra Año (PHA) y la Media de Destetados (MD). El PHA es un indicador clave de reproducción, que dice si estamos aprovechando al máximo nuestras hembras y el objetivo acá es perder el mínimo posible de días productivos. El PHA varía entre 2,30 y 2,56 en líneas generales y podemos dividirlo en dos componentes, los días productivos, que son la gestación y la lactación y los días no productivos – días de Intervalo destete cubrición, repetición de celo, aborto, falsa preñez, muerte de hembras gestantes y vacías, descarte de hembras gestantes y vacías y hembras paradas. Y es justamente sobre esto que debemos trabajar, reducir al mínimo los días improductivos que generan estas pérdidas, y además fortalecer la calidad de nuestra información, para así conocer verdaderamente donde esta nuestra mayor oportunidad de mejora.
En la realidad de las granjas de 35 DHA y alta productividad estamos hablando de un PHA de 2,50 y eso quiere decir que tenemos 115 días de gestación, 21 días de lactación y 10 días no productivos, que son 146 días por hembra por ciclo. Para tener el cálculo exacto hacemos 365.25 / 146 = 2.50 parto por hembra al año. Podemos pensar que 10 días no productivos es algo bajo, pero no, muchas granjas de alta eficiencia logran hasta 6 días. Lo que pasa es que estamos acostumbrados con nuestra normalidad de ineficiencia, con 15, 20 o hasta más días no productivos y si nos detenemos para analizar en detalle no es difícil alcanzar este número. El día no productivo fisiológico de la hembra va a ser de 4 a 5 días, que corresponde al intervalo destete cubrición. Todo lo restante es no fisiológico y tener estos días a un nivel bajo, depende de nuestro trabajo de gestión dentro de la granja.
Por otro lado, contar con menos días no productivos va hacer que necesitemos menos hembras activas para alcanzar la misma cantidad de partos, o si mantenemos la cantidad de madres, la granja entregará más lechones al final del año. Pensamos siempre que, para entregar más lechones, debemos crecer en numero de madres, pero pensar en trabajar la productividad es siempre mejor y más barato.
En la otra punta está la Media de Destetados (MD) y si tenemos un PHA de 2,50, necesitamos 14 destetados en promedio. Es un número alto, pero que está llegando muy rápido a nuestras realidades. Si pregunta a su proveedor genética, ellos seguramente ya tienen granjas que alcanzaron el número de 15 Nacidos Vivos y sí, seguro que están por más. El proceso de mejora genética está muy acelerado y la evolución está mucho más rápida, por eso debemos estar preparados y pensar en el camino para llegar allá, ya que tener más lechones es tener más rentabilidad para nuestro negocio.
Hoy el techo está cada vez más alto y Está en nuestras manos adoptar estrategias correctas de manejo, nutrición, sanidad entre otras, para conseguir tener este número de nacidos. Si hablamos de 15 nacidos y 14 destetados, estamos hablando de una mortalidad alrededor de 7%, que es otro gran desafío para las granjas de alta prolificidad, destetar este lechón que nació y con un buen peso. Son números desafiadores, pero alcanzables y que ya son realidad en granjas de América Latina.
Estamos hablando de la gestión de la información, que es un punto de extrema importancia y que en las granjas de alta productividad es prioridad. Este proceso se inicia en la recolección de los dados en el día a día de la granja. En esta etapa necesario que el equipo sepa la importancia, que debemos tener datos de calidad y que sean confiables. Pues a partir de ellos será hecho el almacenamiento, los análisis técnicos y lo más importante, tomaremos decisiones priorizando las oportunidades diagnosticadas.
Como último punto de abordaje de este artículo, lo que vemos como diferencial en las granjas que llegan a estos expresivos resultados, es el factor humano. Como toda la empresa, la mano de obra calificada, preparada, comprometida y que da lo mejor de si, es el factor que hace llegar más allá. Podemos tener la mejor genética, la mejor nutrición, las mejores instalaciones y una sanidad impecable, pero si la gente no está en el rumbo correcto, no lograremos una granja de 35 DHA, quizá ni de 30.
En todas las granjas de alta productividad es posible ver un equipo alineado, que tiene sus tareas claras y sabe lo que debe ser hecho. Saben que números deben entregar semanalmente, están de acuerdo y no trabajan por trabajar, están formando parte de un proceso de producción que va mucho más allá que una granja.
Debemos estar abiertos, los paradigmas van cambiando, y tenemos que estar siempre un paso adelante, la tecnología está con nosotros, debemos adoptarla y usarla a nuestro favor. Contamos con herramientas que nuestros abuelos y ni si quiera nuestros padres tenían, El avance es exponencial, por lo tanto, no podemos conformarnos con lo que hoy logramos, así que estemos preparados para siempre ir por más.